Cronología: 401 a 715 edad medieval.
En un bosque de pino blanco con sotobosque de encina-coscojo, en una zona entre el camino y los campos de cultivo, la necrópolis es perfectamente visible desde el núcleo de Viladelleva, situado a poco mas de 100 metros al noreste del yacimiento.
Al abrirse el camino apareció un conjunto funerario compuesto por 4 tumbas del tipo cista y orientadas este-oeste, enterradas a unos 40 cm. del nivel del suelo. Una de ellas parece un entierro infantil. Los tamaños de las tumbas son de 1,70 aproximadamente por 30 centímetros de ancho y una profundidad de 40 centímetros aproximadamente. Parece que sufrieron una intervención furtiva; al no localizarse restos (excepto algunos fragmentos óseos localizados en el lugar), se piensa que fueron violadas ya en tiempos antiguos. A su abrigo se pueden observar la presencia de losas planas que hace pensar que pueda tratarse de inhumaciones aún no excavadas. Sin embargo la espesa vegetación y sotobosque hace difícil apreciarlo. Hacia la parte norte se puede observar la presencia de algunos muros de piedra seca que podrían formar una estructura de habitación. Se hace difícil de precisar este extremo ya que es una zona con aterrazamientos y gran cantidad de muros de bancal.
En 2006 miembros de la Universidad Autónoma de Barcelona prospectaron el yacimiento, recogiendo alrededor de la necrópolis varios fragmentos de cerámica de cronología medieval indeterminada. En esta visita documentaron también una quinta tumba, supuestamente descubierta y vaciada en los últimos años.
En octubre de 2010, se constató que la segunda tumba desde el norte conserva parte de las losas de la cubierta. En ese momento podían observarse 4 tumbas y una única losa descubierta de una quinta. Alrededor de las tumbas se localizaron otras losas, posiblemente de cubiertas desplazadas.
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