Estilo: románico / barroco.
Siglos: Xll-Xlll / XVll
Santa Maria de Torredenegó actualmente se encuentra liberada de las coletillas posteriores, excepto de la rectoría que está adosada a la fachada de poniente. Conserva todavía la estructura románica del siglo Xll. La planta es rectangular y de nave única. El interior de la nave presenta una bóveda de cañón y el ábside se abre con un arco preabsidal. El ábside es semicircular con el paramento formado por grandes sillares escuadrados y de buena talla menos en la base, donde son más grandes e irregulares. El ábside presenta una cornisa de piedras trapezoidales en bisel y dos vanos: una en el centro, con arco de medio punto de piedra única y de derrame; la otra rectangular en la esquina de mediodía. La portalada se abre en el muro de mediodía. Tiene dos columnas a ambos lados con base lisa y capitel decorado con motivos vegetales. La arquivolta tiene un bordón que sigue las columnas, una franja ancha sin decoración y una banda ligeramente encorvada, decorada con palmetas sin interrupción. Algunos elementos originales se conservan en el Museo Diocesano de Solsona. En el frontis se levanta un campanario de espadaña con dos vanos que tiene enganchada la rectoría.
La primera noticia es de 1142. Es un documento que le llama "Sancte Marie de Turre de Negó". Este topónimo hace referencia a torre o masía fortificada, alrededor del cual se extendía una zona que debía tener por señor un tal Enneg o Ennegó persona de la primera época de la conquista, En su término había ya en el siglo Xl diversas propiedades feudales bajo el dominio de los Condes de Urgell. En el siglo Xl aparece como señor Amaltruda, de la familia vizcondal de Cardona. En 1158 poseían este sector Pere y Arnau de Freixenet, que hicieron dominaciones de tierras a Santa Maria de Solsona. En los documentos, pues, de los siglos Xl-Xll. Torredenegó está comprendido como un término más o menos extendido, con diferentes masías esparcidas. En 1313 adquirió la categoría de parroquia. En 1593, con la creación del obispado de Solsona, todavía la mantenía, aunque posteriormente la perdió.
Según el dintel datado en 1660, en la segunda mitad del siglo XVll la iglesia fue ampliada por la esquina norte con un cuerpo que servía de sacristía. También se añadió un corazón postizo.
Desde 1936 su portalada se conserva en el Museo Diocesano de Solsona. En la iglesia en su sitio había una puerta nueva, que intentaba recordar el original. Finalmente, la dirección del Museo, a instancias de la gente del pueblo, en 1988, restituyó en la portalada del templo el complemento de columnas, capiteles y arcada que había habido.
Fuente: Geoportal del patrimoni cultural
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